Ayyy que ganas tengo de que todo esté en su sitio para poder descansar…
Cuando pronuncié esta frase, Juanito me dijo: “Descansarás cuando hayas muerto”. Como puedes imaginar , me enfadé bastante con él.
- Tu dijiste que “complicarse la vida con nuestros sueños” era el primer paso hacia la felicidad, ahora me dices que la materialización de esos “sueños” es la “muerte”, ¿en que quedamos? ¡¡¡yo no me quiero morir!!!
- Verás, amigo Juanjo, tu vida son “dos viajes”: El de tu “ser” y el de tu “ego”. Tu “ser” sueña sólo con “amar” y no dirige ese “amor” hacia ningún lugar en especial. Le es suficiente “amar” aquello que se presenta delante: La lluvia, la soledad, las dificultades, etc. Si, todo y cualquier cosa, incluida la muerte. En cambio, tu “ego” sueña con todo tipo de cosas concretas: Un bonito cuerpo, ganar mucho dinero, tener éxito, etc.
El caso es que a menudo nos “colgamos” entre los dos “viajes”, de manera que cuando el “sueño del ego” se fractura y a la vez no estamos “identificados con el ser”, nos entristecemos y por un rato, nos negamos a vivir.
- ¿Pero tu dices que el “ser” ama todo, lo que llamamos bueno o malo?
- Si, pero ¿Estas suficientemente identificado con él? En otras palabras ¿estás preparado para “amar” igual a tu amigo que a tu enemigo? ¿amar con la misma intensidad la fortuna y el infortunio? ¿sentir el mismo amor ante un nacimiento que ante una muerte?
- ¡¡¡no!!!
- Entonces, amigo Juanjo, deberás “cabalgar” un tiempo a lomos de tu “ego” y a la vez irte “identificando” poco a poco con tu “ser”.
- Pero he leído muchos libros que dicen que el “ego” es el enemigo del “ser”.
- Ese es el problema de leer tantos libros, que te crees todo lo que dicen sin experimentarlo por ti mismo. El “ego” nació del “ser”. En otras palabras, el bebé nace muy “puro” y comienza a “relacionarse” con el entorno, Primero serán papá y mamá, luego familiares, amistades, profesores, televisión y toda “esa información” que sin duda no va a “encajar” con la ”pureza” del bebe/ser.
Es ahí donde el bebe/ser, que se “siente solo” en su “manera de percibir”, comenzará a “adaptarse” con el fin de “encajar” en las “maneras de percibir del mundo”. En esa etapa el bebe/ser comienza a “pensarse”. Dice, por ejemplo, cuando digo “gu-gu” mama se ríe, así que decir “gu.gu” debe ser bueno. Y así continúa “esa peculiar construcción” de lo que será su personalidad, en otras palabras su “ego”.
El tema se complica a medida que el bebe/ser, ahora niño/ego/ser, obtiene sus primeros éxitos a través de sus “construcciones estratégicas” (siempre con el fin de “encajar”, no de “serse fiel”) Piensa: Mamá me quiere por que hago así o asá, todos se ríen de mis “gracietas” ¡¡¡vamos bien!!!, etc.
Mas tarde, el niño pasa a ser un niño/ego. Toda su energía se dedica a “complacer” para hacerse un hueco en este mundo extraño. A veces “complacer” será “llevar la contraria” y otras “obedecer”, pero siempre desde un “mismo eje” (molde o contramolde) pero siempre ya, “esclavo del molde”.
Cuando somos adultos, ya hemos “olvidado” o mas bien “sepultado” esa “experiencia”. Nos hemos “identificado plenamente” con lo que creemos “ser” y aunque el auténtico “SER” sigue siendo lo “único real”, ya no lo vemos.
El “ego” se construyó en el mundo de la “relación” (por eso cuando estamos a solas, nos permitimos hacer cosas que nunca haríamos en público) Por ello la naturaleza del “ego” es “conseguir”, ser “mejor que otros”, ganar mas que los demás, tener razón, etc. En otras palabras ¡¡¡soñar!!!
Si, amigo Juanjo, lo que sueñas es la voz de tu “ego”. Pero a la vez tu “ser” sigue ahí, puro e inmaculado y sigue con su único “sueño” AMAR, AMAR Y AMAR.
- Pero ¿no es eso contradictorio? Yo siento amar a mis hijos, quiero que les vaya bien en la vida y me resisto a aceptar que es mi “ego” quien les ama.
- Amigo Juanjo, recuerda que eres “dos versiones de ti mismo” que operan simultáneamente. Observa tu frase: Amo a mis hijos (es tu “ser”) Quiero que todo les vaya bien ( bien o mal, malo o bueno, etc. Están en tu mente, son tus aprendizajes, tu “ego”)
- Comienzo e entenderte, pero ¿Cómo hago? ¿Cómo puedo distinguir la voz de mi “ego” de la voz de mi “ser”?
- La mala noticia es que no puedes hacer tal “distinción”. La buena noticia es que no necesitas para nada hacer tal “distinción”.
- ¿…?
- Si el “ego” es una “escisión” del “ser”, porqué no “utilizarla como “camino de vuelta”. Que el “ego” sueña con cosas concretas, ¡¡¡a por ellas!!! Pero recuerda que el “ser” lo que quiere es “amar”, “Amar incondicional” y necesita que te “pasen cosas” para poder “amarlas”. Lo único que el “ser” no puede utilizar es la “muerte en vida” a la que nos conduce el “pensamiento”.
Si niego al “ego”, niego mi “realidad actual” (mis deseos, temores, pasiones, etc.) Si niego al “ser” me perderé en el mundo de lo ilusorio y sólo “despertaré” cuando mi muerte se acerque, viendo la “futilidad” de tanta lucha.
- ¡Claro! Como el poema “caminante no hay camino, se hace camino al andar”. Así lo que sugieres es “caminar amando todo lo que sucede” ya que el éxito no está en “llegar” si no en “ir yendo”
- ¡Exacto! Pero cuidado, ¿Cuándo o porqué emprendes un camino? ¿Qué es lo que te motivaría a ponerte en marcha? ¿Qué te arrancaría del sofá, de las lágrimas de autocompasión, de los tóxicos, de la apatía y la ira, los celos y el aislamiento, de todo aquello que nos inmoviliza?
- ¿La ilusión?
- ¡¡¡Exacto!!!
- Pero si has dicho que “lo ilusorio” es el ámbito del “ego” ¡que contradicción!
- Bueno, mas que una “contradicción” es la “descripción de una paradoja”. y, amigo Juanjo, la existencia entera es una “gran paradoja”. Por eso poca gente ha comprendido la “naturaleza de la existencia”.
Así que ¡¡¡sueña!!! y ¡¡¡movilízate!!! Cuando estés en marcha pletórico de “motivación”, cuando despertarse por la mañana sea un ¡¡¡wuaw que bien!!!, cuando los pensamientos sean positivos y constructivos, cuando sentimos que todo está en marcha…¡¡¡ES EL MOMENTO!!! ¡¡¡DECELERATE!!! ¡¡¡PARA!!!
Es en ese momento donde el “ego” se puede “apropiar” de nuestras vidas. Valorando los “sueños” que se cumplen, los que no, las personas (buenas) que nos ayudan, las personas (malas) que nos lo ponen difícil, etc. Si logras no entrar ahí, sino “amar” lo que sucede (que es conectarse con el “ser”) ¡¡¡YA LO TIENES!!!
- Ahora si te he entendido, dices que “sueñe” con lo que de veras me motive: Un cuerpo bonito, ganar mucho dinero, una preciosa casa, éxito en mi profesión, etc. (lo que sea en cada caso) Que permita que “eso” me ponga en pié, que me “abra a la vida” y cuando estoy motivado, en pié y contento, es el momento de “ver” con los ojos del “ser”, es decir “ver” con el mismo “amor” lo que se “cumple” que lo que se “frustra”. Pero cuándo algo se frustra pierdo la “motivación” con facilidad y el sofá, las lágrimas, la ira, etc,vuelven a llamar a mi puerta, entonces ¿Qué hago?
- Pues volver a soñar. Por ejemplo tu soñaste con la pareja ideal y te explotó en la cara. Bien, acepta “ese” punto de partida, “reinvéntate” y vuelve a “soñar”. El caso es mantenerte en pié, es lo único que tu ser necesita para guiarte al éxito.
- Juanito, mira que eres raro, pero la verdad es que lo que dices me hace sentir un escalofrío, como si ya lo supiera y tu me lo recuerdas. Lo voy a intentar.
Bueno ya veis que Juanito está místico perdido últimamente, pero parece que no hay gran cosa que perder ya que su propuesta engloba lo “material” con lo “espiritual”. Si uno no “funciona” está lo “otro”. Yo, al menos, lo voy a intentar, la verdad que “ir a por mis sueños” me motiva y “amar” el resultado que fuere sería difícil, pero como “reinventarse” y volver a empezar “vale”… ¿porqué no?
Muchísimos besos y abrazos (es que os quiero mucho, coño) a todos Juanjo & Juanito
Voy a poner un comentario porque te lo mereces y me he fijado que en esta ocasión te habías quedado solo. Tu sólo que tanto necesitas de compañía . . .
ResponderEliminar"fa vint anys que tinc vint anys i encare tinc força, no tinc l'anima morta i sento bullir la sang" me parece que es el resúmen que JM Serrat diría de todo lo que has dicho en este Post.